Se aproxima, y de qué modo. Superada la prueba de fuego de una primera edición con nota alta, Monkey Week ocupa de nuevo El Puerto de Santa María, Cádiz. Con un ojo puesto en festivales extranjeros que mezclan elevado tránsito de profesionales del sector de la música con una atractiva programación de bandas y solistas, los organizadores han presentado una agenda enloquecedora, con múltiples espacios a los que acudir y un listado de grupos kilométrico. Como, además, el evento coincide con el aniversario de Ruta 66, se ha programado una Ruta que conducirá a quien se atreva a formaciones como los barceloneses Mujeres (primera estación) hasta los mordiscos de Perro Peligro (última parada, tres días más tarde). Así que dosifiquen fuerzas, que la travesía promete ser intensa.
El Escenario Heineken propone a los nombres más conocidos, desde los iconos del krautrock Faust hasta los incombustibles punks ingleses Buzzcocks, pasando por los emergentes The Strange Boys y Lüger, y el circuito de showcases se nutre de cerca de un centenar de propuestas, con los hipnóticos portugueses A Jigsaw, los viscerales Guadalupe Plata y los ruidosos The Guinea Pig como citas ineludibles.
Para rematar la jugada, se han organizado interesantes mesas redondas, y a quien firma estas líneas le han invitado a moderar una de ellas, que tratará sobre la evolución de la oferta de música en vivo en el último cuarto de siglo. Tengo el placer de ocupar localidad preferente para seguir las sabias palabras (seguro) de unos tertulianos de alto nivel: Carlos (de la promotora Riff Producciones), Marcela (responsable de la mítica sala madrileña El Sol), Ernesto (veterano músico, programador y comunicador de diversos festivales, entre ellos FIB) y Fino (músico, antiguo miembro de Los Enemigos embarcado siempre en algún interesante proyecto). Ya les contaré, sólo hay que intentar llegar en las mejores condiciones posibles a la cita: domingo 10 a las 13:30 horas. Todo un reto.
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