Así era su música. Estrictamente personal, empaquetada para quien quisiera desenvolver la caja de los truenos y recibir en el rostro un bofetón sonoro de dimensiones desconocidas. Eternamente ligado a su disco Safe As Milk (uno de los mejores albums de la historia, en el que en 1967 el Captain, Don Van Vliet, reescribía el viejo blues) y a su provocador Trout Mask Replica. Retirado de circulación desde que se volcó en la pintura, para muchos seguía siendo un tesoro incomprensiblemente ignorado por la mayoría de mortales que siguen el mundo del rock con asiduidad. Quizás ahora las cosas cambien, ya sabemos cómo funciona esto. Para mí siempre será el bigotudo que grabó, junto a otro bigotudo llamado Frank, un disco en directo el mayo de 1975 en el Armadillo World Headquarters de Austin, Texas (sí, el mismo lugar donde Commander Cody registró otro disco imprescindible, Live From Deep In The Heart Of Texas dos años antes). El disco se llamó Bongo Fury, y <<Muffin Man>> nunca sonó mejor.
Buenoooooooooooo!!!! Uno de mis Live preferidos. Una obra maestra.
ResponderEliminarEscuché hace tiempo Trout Mask Replica, pero me quedo con Bongo Fury, uno de los grandes directos de la Historia del Rock. Imprescindible.
Una gran pérdida, sin duda alguna. Excéntrico y marciano, pero insustituible.Saludos!
ResponderEliminarIrrepetible es la palabra. El otro día Atom Rhumba le rindieron homenaje en su concierto de Bilbao, pinchándolo antes y durante el concierto y tocando un pasaje de Clear Spot. Fue bonito.
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